El insuficiente refuerzo de plantillas que acordó la Consejería a inicios de curso con tres organizaciones sindicales tan solo venía a corregir la masificación ilegal de cientos de aulas hasta 2º de la ESO, por lo que no solo es preciso mantener esos puestos de trabajo sino que sería necesaria una mayor contratación y que ésta sea incluida en la colocación de efectivos.
Éste era el comienzo de la nota publicada por USTEA el 21 de mayo, https://pruebas-educacion.ustea.org/ustea-exige-una-negociacion-para-el-aumento-de-las-plantillas-para-el-curso-2021-22/.
Pues bien, a escasos días del final de curso seguimos en la misma situación, con el agravante ya conocido del acuerdo entre el Gobierno y las Comunidades Autónomas por el que “se podrá volver a la misma ratio de alumnos por profesor de antes de la pandemia”, un acuerdo que no deja de ser sorprendente en Andalucía, ya que desde que se iniciase la pandemia no hemos asistido en ningún momento a un descenso del número máximo de alumnos y alumnas que podían ocupar un aula en ninguna de las etapas de nuestro sistema educativo. En efecto, el acuerdo alcanzado entre la Consejería de Educación y las organizaciones sindicales CSIF, ANPE y CCOO, por el que se realizó una contratación extra de docentes a inicios del actual curso, estaba destinado casi en exclusiva a corregir la situación de ilegalidad en cuanto a la ratio en que se encontraban numerosas aulas en aquellos niveles en los que no se ofreció la semipresencialidad (hasta segundo curso de la ESO), lo que significa que se mantuvieron ratios ilegales de 3º de ESO en adelante. USTEA se negó a firmar aquel acuerdo por ser manifiestamente insuficiente y porque significaba legitimar la masificación ilegal de las aulas incluso en los momentos más duros de la pandemia.
A estas alturas no está prevista aún sobre el calendario negociación alguna sobre este asunto, a pesar de que desde la administración se nos informó que ésta comenzaría en la semana del 14 al 18 de junio,y mucho nos tememos que sufriremos de nuevo una absoluta improvisación a comienzos del próximo curso. En USTEA mantenemos las mismas exigencias, un aumento estructural de las plantillas que suponga el mantenimiento del profesorado contratado coyunturalmente y el incremento necesario, tanto de docentes como de otros profesionales, para eliminar definitivamente las ratios ilegales, conseguir el descenso generalizado de las mismas y procurar el refuerzo de la atención a la diversidad, que atienda como se merece a todo el alumnado, especialmente al que presenta necesidades específicas de apoyo educativo. Y volvemos a reclamar esta negociación con carácter inmediato, más allá de discursos hueros y grandilocuentes, como el que pronunciaba el consejero Imbroda en su balance del curso, realizado en el marco de la Mesa Sectorial de 3 de junio, del que ya dimos cuenta en nuestra web https://pruebas-educacion.ustea.org/ustea-hace-balance-del-curso-con-el-consejero-de-educacion/
Tampoco sabemos la repercusión que podrá tener este asunto sobre el profesorado que se encuentra opositando actualmente, o si llegará a tenerla en el inminente proceso de colocación de efectivos.
Sin embargo, sí nos va quedando meridianamente clara la ineptitud de este equipo de gobierno, en lo que se refiere a la administración educativa, que no sale de un entuerto si no es para entrar en otro todavía peor, lo cual supone un auténtico despilfarro, un derroche de esfuerzo humano (profesorado, equipos directivos, profesionales del ámbito de la enseñanza pública que no ejercen docencia, el propio personal técnico de la administración…) y de recursos materiales, que no satisfacen las necesidades de la enseñanza pública andaluza, al mismo tiempo que generan desaliento y un profundo malestar.
Andalucía, 24 de junio de 2021